El Puerto de Barcelona batió el récord en cuanto a movimiento de comercio internacional en contenedor en 2014. El presidente, Sixte Cambra, afirmó que el enclave acabó el año moviendo 1,05 millones de TEUs llenos de importación y exportación.
El presidente del Puerto de Barcelona también destacó que desde 2008 hasta ahora la exportación de contenedores llenos ha crecido en el Puerto de Barcelona un 43%. Solo en el último año, la exportación de contenedores se ha incrementado un 7%, superando claramente a las importaciones, que aumentaron en 2014 un 12%.
El tráfico total de contenedores registrado en el puerto de la capital catalana en el último año fue de 1,9 millones de TEUs, cifra que supone un incremento del 10% con respecto a los contenedores manipulados en el ejercicio correspondiente a 2013.
Todo este incremento de actividad en el Puerto de Barcelona se debe a la gran diversificación de tipos de tráfico que recibe. El tráfico total de mercancías creció el año pasado en el Puerto de Barcelona un 9% en comparación con 2013, alcanzando los 46,3 millones de toneladas, frente a los 42,6 millones de toneladas del año anterior.
Los graneles líquidos crecieron un 21%, sumando un total de 12,9 millones de toneladas frente a los 10,7 de 2013, mientras que en el apartado de los graneles sólidos el incremento se situó en un 9%, logrando pasar de 4,4 a 4,8 millones de toneladas.
En cuanto a las líneas de short sea shipping, éstas movieron un 10% más de mercancías que las manipuladas en 2013, y el tráfico de vehículos sumó 748.000 unidades, un 6% más que en el ejercicio anterior.
El presidente del Puerto de Barcelona anunció que el próximo día 12 de febrero se producirá la presentación del tercer Plan Estratégico del enclave, un documento que recoge el posicionamiento estratégico del puerto. El objetivo prioritario es convertirse en el primer centro de distribución europeo de la zona del mar Mediterráneo, superando a sus competidores principales, como lo son los países del norte del continente.
Sixte Cambra, reclamó la necesidad de dotar a los puertos españoles de una mayor autonomía de gestión, en especial en lo referente a la fijación de precios de los servicios para poder competir con los grandes puertos noreuropeos.
Fuente: Diario del Puerto