Cómo hacer negocios en Portugal: entra en el mercado luso

Nov 10, 2021

Hacer negocios en Portugal merece la pena. Con un PIB correspondiente a la sexta parte del PIB español, nuestro país vecino es, sin embargo, uno de los principales mercados para las empresas españolas. España es el principal proveedor de Portugal: un 30% de las importaciones portuguesas proceden de España. Para hacernos una idea de la importancia del mercado luso: España exporta más a Portugal que a toda América Latina. El país peninsular es nuestro cuarto cliente, ya que recibe un 7% de las exportaciones españolas. Aproximadamente el 80% de las transacciones comerciales portuguesas se llevan a cabo con países de la Unión Europea. ¿Cómo hacer negocios en Portugal con éxito?

 

Elige el sector adecuado para acceder al mercado luso

 

Se calcula que hay unas 3.500 empresas españolas establecidas en Portugal. ¡La tuya también puede abrir mercado allí! España exporta a Portugal, principalmente, automóviles (y también piezas y recambios), maquinaria, material eléctrico y plásticos. Además, somos exportadores de energía eléctrica, petróleo y derivados y aceite de oliva. Aunque los productos industriales y tecnológicos son los sectores estrella, los sectores de alimentación, bebidas y bienes de consumo también representan un volumen de negocio importante en Portugal. Los productos ecológicos, tanto alimentarios como de limpieza, también están en auge. 

 

 

¿Cómo establecer una sucursal en Portugal?

 

Para hacer negocios en Portugal, puede resultar interesante abrir allí una oficina. Para ello es preciso acudir al Registro Comercial. Las leyes portuguesas no contemplan restricciones a la entrada de capital extranjero. Los ciudadanos de la Unión Europea pueden tramitar y obtener un número de identificación fiscal (NIF) directamente desde la administración tributaria lusa, sin necesidad de intermediarios. Las tasas de creación de una sucursal son de 200€. Las sociedades comerciales, sociedades civiles en forma comercial, cooperativas, agrupaciones de empresas y agrupaciones europeas de interés económico pueden abrir una sucursal en Portugal, siempre y cuando dispongan ya de una sede en el extranjero.

 

Documentación para abrir una sucursal de negocios en Portugal

 

  • identificación del solicitante
  • documento que acredite que el solicitante tiene el poder de crear la sucursal
  • documento que demuestre la existencia legal de la entidad que quiere crear la sucursal
  • texto completo y actualizado de los estatutos o estatutos de la entidad que quiere crear la sucursal
  • acuerdos sociales que aprueben la creación de la sucursal y el nombramiento de sus representantes
  • números de identificación fiscal portugueses de los representantes de la sucursal que se creará

Los documentos redactados en un idioma extranjero deben ir acompañados de una traducción jurada. Esta traducción puede tramitarse también ante notarios y registradores portugueses, en las cámaras de comercio e industria lusas o bien en un consulado de Portugal en España.

Más información:

Ministerio de Justicia Portugués: registrar una sucursal

Tel.: (+351) 211 950 500 (días hábiles, de 9 h a 17 h)

Correo-e: rnpc.sucursalnahora@dgrn.mj.pt

 

 

Cultura de negocios en Portugal: parecidos, pero distintos

 

La cercanía geográfica no debe engañarnos. Portugal y España comparten península, hablan idiomas latinos y tienen vínculos históricos significativos. Sin embargo, las diferencias culturales entre ambos países son tan importantes como sus semejanzas. Tenlas en cuenta.

 

Inglés, la lengua de negocios en Portugal

El inglés es el principal idioma de negocios en Portugal, especialmente en las grandes ciudades, como Lisboa y Oporto. Los portugueses hablan inglés con fluidez. Ocasionalmente, las semejanzas entre el español y el portugués pueden sacarnos de un apuro, pero lo más recomendable, en Portugal, es comunicarse en inglés.

 

Cómo presentarte

Un apretón de manos es la mejor forma de saludar al inicio de una reunión de negocios en Portugal, tanto para hombres como para mujeres. Es habitual intercambiar tarjetas, pero únicamente con cargos directivos o ejecutivos. Conocer y respetar la jerarquía es importante en Portugal: infórmate bien de los cargos y funciones de tus contactos comerciales, así como de sus títulos académicos o distinciones (por ejemplo, puedes llamar doctor o doctora a un interlocutor que posea un doctorado). No obstante, evita hablar directamente de salarios o de patrimonio personal, ya que se considera de mal gusto.

 

Viste con formalidad

Elegancia y formalidad imperan en las reuniones de negocios lusas. Ante la duda, traje y corbata para los ellos o traje sastre para ellas.

 

Calidez y cercanía

Establecer buenas relaciones personales es clave para hacer negocios en Portugal a largo plazo. Por ello, son bastante comunes los almuerzos y cenas de negocios. Incluso una taza de café es una buena oportunidad para estrechar lazos. En estos encuentros no es recomendable hablar de trabajo o, al menos, no directamente. Lo cortés es conversar sobre temas de interés general y hablar con naturalidad. Un exceso de halagos se interpretaría como falta de sinceridad. Los temas favoritos de la mayoría de los portugueses son el fútbol y la gastronomía. Los vinos portugueses son deliciosos, mostrar interés por ellos suma puntos. Lo mismo puede decirse de otras manifestaciones culturales lusas, como música, libros, arquitectura o historia. La esfera personal (familia, pareja, amistades, hijos) puede incluirse con tacto en la conversación. Sin embargo, conviene evitar temas polémicos, como religión o política.

 

Reuniones y negociaciones largas

A diferencia de lo que sucede con las empresas del norte de Europa, la cultura de negocios portuguesa incluye reuniones dilatadas. No siempre se sigue un orden del día definido. Tampoco se suele ir al grano, lo habitual es empezar con algo de conversación informal para romper el hielo. Es muy importante dejar que todos los participantes se expresen. No trates de forzar acuerdos o conclusiones precipitadas.

Las negociaciones requieren paciencia y perseverancia. Los portugueses se expresan con cortesía y sutileza. Pocas veces nos darán una negativa directa. Por ello, es fundamental leer entre líneas y observar las dinámicas de relación entre los distintos participantes del encuentro. La mentalidad de negocios portuguesa es de win-win: la agresividad competitiva no está bien vista. El objetivo habitual es alcanzar acuerdos en los que todas las partes salgan ganando.

Después de la reunión, resulta muy recomendable solicitar o enviar por escrito los compromisos acordados, ya sea a través de un acta formal o de un simple correo electrónico. Los plazos temporales no siempre son precisos: expresiones como «mañana» o «la semana que viene» son, a menudo, orientativas.

 

Flexibilidad ante todo

Los portugueses son creativos, ágiles y resolutivos en los negocios, muy hábiles resolviendo crisis de última hora. Esperarán de tu empresa la misma cintura para adaptarse a los cambios. Si surgen imprevistos o asuntos urgentes, tu buena predisposición para arremangarte es clave. Por eso, debes estar preparado para cualquier situación. Por ejemplo, un pedido inesperado. Con Iberland Portugal, dispones de salidas diarias a Portugal, garantizadas. Y, si el tiempo apremia, cuenta con Flashpallet para tus envíos paletizados urgentes a cualquier punto de la Península Ibérica, con servicios de recogida y entrega antes de 24 horas. ¿Lo quieres? Lo tienes. ¡Libérate!